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Investigación histórica, grupera y futbolera

Friday, July 15, 2011

El mejor CD del Grupo Bryndis: Memorias (2003)




Para el mejor grupero-grupero de la primera década del siglo XXI, ¡¡Aaahhh!!!

Por Eduardo Marcos


Hace ocho años aproximadamente por estos días, salió al mercado el mejor disco de la historia musical del Grupo Bryndis (1992-2009), conformado en ese entonces por sus cinco integrantes que decidieron unirse en 1989 en Santa Paula, California, USA y que en 1992 se lanzaron de manera formal al mercado grupero nacional con su primera producción 15 Hits. Romance sin Límite. Después de muchos éxitos y logros durante estos años, a principios del 2010 el ex vocalista José Guadalupe Guevara Ceballos junto con su hermano Juan (el baterista), decidieron dejar la agrupación por fricciones personales con el guitarrista, director y principal compositor Mauro Posadas Gallardo. Los otros dos integrantes, Gerardo Izaguirre y Claudio Pablo Montaño, decidieron seguir vinculados al grupo.

De manera inmediata, tres nuevos integrantes se integraron al Grupo Bryndis (incluyendo un hijo de Posadas y el primer vocalista Tony Solís) mientras que los hermanos Guevara crearon otra agrupación de nombre Bryndis X Siempre (BXS). Desde la ruptura musical entre ambos bandos, esto ha generado constantes pugnas y polémicas por el uso legítimo del nombre de “Bryndis” que al parecer continuaran por un buen tiempo. Ambas agrupaciones ya han sacado nuevos discos, pero la verdad pese a los esfuerzos de cada una, ya no es lo mismo.

La voz de Tony Solís no puede alcanzar ese sentimiento que le imprimía Guevara, mientras que los músicos de BXS son unos desconocidos para la mayoría y que no tienen el talento de Posadas, Izaguirre y Pablo Montaño. Por lo tanto, ya no es lo mismo escuchar tanto al Bryndis de Posadas como al BXS de los Guevara. En las siguientes líneas haré una remembranza del contenido del mejor álbum del Grupo Bryndis, como una especie de homenaje por su alta calidad.

Después de un año sabático que el Grupo Bryndis tomó en el año 2002, en julio del 2003 regresó al contexto grupero con un nuevo disco que contenía interesantes innovaciones musicales. Memorias fue el título de su décimo material discográfico formal bajo el sello de DISA (disquera que los adoptó desde 1992) y que incluyó temas ochenteros e inéditos, algo que no sucedía desde su primer disco ya citado. En total fueron doce temas (prevaleciendo los covers) con lo cual se cortó una cadena de siete discos consecutivos con diez canciones.

Para este disco, sus integrantes cambiaron la batería ordinaria por una más compleja que ellos mandaron a diseñar especialmente para esta nueva etapa de su carrera musical. A partir de este momento, su ex vocalista José Guadalupe Guevara dejaba las percusiones como lo venía haciendo desde siempre para cantar únicamente. El sonido de esta nueva batería le vino a dar un toque más dinámico y juvenil a la mayoría de los tracks, en especial a las tecnocumbias.

En aquel julio del 2003, el primer tema promocional de este álbum fue “Quizás sí, quizás no”, una tecnocumbia romántica que rápidamente se convirtió en una de las consentidas de los fans gruperistas y que se colocó dentro de los primeros lugares a nivel nacional e internacional. En mi caso personal, yo escuché este por primera vez esta canción el 22 de julio de aquel año cuando compré “de botepronto” el CD original en un supermercado local, pues su precio me pareció accesible en comparación al anterior (En el idioma del amor, 2001) que resultó caro.

Desde las primeras veces que escuché esta rola me gustó, pero notaba algo extraño en sus notas musicales: que el sonido de las percusiones no eran de una batería tradicional. Con el paso del tiempo, me di cuenta que esta canción fue un cover interpretado por un argentino que a veces programaban en una estación local de temas del recuerdo. Casi dos años más tarde, en junio del 2005, a través del canal Videorola me enteré que este tema contaba con videoclip oficial al verlo por primera vez y completo, y que a ser sincero la historia no tiene nada que ver con la letra. Pese que la letra es melancólica, el ritmo es sumamente movido y con el paso del tiempo se convirtió en una de mis favoritas de todos los tiempos. No sé si por la letra, el ritmo musical o porque el ex vocalista le imprimió mucho sentimiento al momento de grabarla, como si él hubiera vivido un hecho relacionado.

En este videoclip me di cuenta que el grupo cambió la batería tradicional por un complejo junto de percusiones electrónicas no propio para gruperos y que su ex vocalista ahora solo se dedicaba a cantar. Fue grabado en Chicago, Illinois, en el cual los integrantes del grupo aparecen vestidos con ropa en color negro, apareciendo después una hermosa modelo que luce una anatomía espectacular cuando llega al baño para ponerse un traje también en color negro y que después es perseguida desde su casa por ellos. Estas escenas fueron combinadas con otras que fueron grabadas en un estudio de grabación. Este videoclip el tercero más reproducido en YouTúbe de los oficiales que ostenta el grupo (1992-2009), con más de un millón de visitas, sólo superado por los de “Por estar pensando en ti” y “Amor prohibido” (versión poema).

Por lo anterior, se convirtió en el éxito internacional número uno para el grupo, pues según comentarios leídos en el canal YouTúbe, tuvo mucha aceptación en varios países de Centroamérica, Estados Unidos y Sudamérica (como Perú, Bolivia, Paraguay y Argentina) más que en su propio país. En años recientes, también a través de YouTúbe, me enteré que esta canción fue grabada por primera en 1979 por un cantante italiano llamado “Pupo” (que en realidad es Enzo Ghinazzi y coautor) titulada originalmente como “Forse si, forse no” y que al parecer es una de las clásicas entre los italianos de aquella época.

También para este álbum regresó el ritmo de las chicanas como fue el caso de “Por un amor” (que alguna vez grabó Vicente Fernández), algo que no sucedía desde 1993 con el tema “Amor perdóname”. En octubre del 2003 (si mi memoria no me falla), el segundo sencillo promocional fue “Abrázame”, otro cover que fue grabado a ritmo de chicana norteña y que por primera vez el grupo utilizó acordeón, bajo sexto y batería tradicional. Otro tema en el cual se usó acordeón fue “Boda truncada”, aunque no tuvo publicidad como el anterior. Además de “Quizás sí, quizás no” y “Abrázame”, hay otras canciones que me gustaron mucho por su ritmo y letra como “Yo vendo unos ojos negros” (otro cover añejo), “Dolor de amor” (uno de los pocos temas inéditos de este disco y autoría de Posadas), “Me haces falta” y “Cómo te extraño”.

Por la inclusión de covers, instrumentos y ritmos ajenos que no fueron parte de Bryndis antes del 2002, quizá esto obedeció que ellos previeron que el género grupero empezaba a decaer y que hicieron estos cambios para mantenerse vigentes en el mercado grupero nacional e internacional. Desde mi punto de vista, esto lo ví como una reinvención musical de la agrupación potosina y que continuó hasta su fragmentación. Hace dos años, adquirí unos discos ochenteros de Bryndis que fueron grabaron de manera semiprofesional (con una baja calidad en grabación de audio) antes de 1992 en los cuales aparecen algunos de los covers tanto de Memorias como de su primer disco formal.

Por otro lado, la fotografía de la portada de este disco resultó espectacular quizá por el diseño gráfico, en la cual los cinco integrantes del grupo aparecen vestidos como rockeros (vestidos principalmente en color negro). Al parecer la fotografía fue tomada en un crucero de la ciudad de Chicago. Como dato curioso de esta portada, el ex vocalista del grupo aparece usando lentes (¿para vista cansada?), algo que pasa muy desapercibido a simple vista.

El papel que compone la portada de este álbum es una hoja tamaño tabloide doblada en cuatro partes, en el cual aparecen las letras impresas de cada uno de los doce temas, la lista de los mismos y sus datos. Además aparecen fotografías individuales de cada uno de los músicos (en blanco y negro) y los créditos de los colaboradores que trabajaron en la producción de este disco. En aquel entonces cuando compré este CD no contaba con reproductor de discos, por lo que sólo lo podía escucharlo en PC. Aproximadamente en noviembre de aquél 2003, también lo compré en formato casette pues contaba con radiograbadora. Extrañamente, el cartoncillo no incluía la letra impresa y de los temas.

Finalmente, hago el desglose de los títulos de los temas que componen este gran disco, incluyendo su ritmo y sus respectivos compositores. Debo aclarar que la relación original presenta algunos errores ortográficos en alguno de los nombres, tal como fue en el caso del tema “Quizás sí, quizás no” que en vez de haberse escrito como Enzo Ghinazzi aparece como “Ghmnazzi”. Algunos ritmos tuve que precisarlos mejor, principalmente los que son cumbias y tecnocumbias. Hoy han pasado ocho años de la edición del CD Memorias y creo que siempre será una verdadera joya discográfica no sólo para el Grupo Bryndis del periodo 1992-2009, sino de la música grupera en general.


01.- “Quizás sí, quizás no” (Tecnocumbia)/ Enzo Ghinazzi, Pace P. Barbani y Michelle
02.- “Pero tú no estás” (Cumbia)/ Miguel Gallardo
03.- “Por un amor” (Chicana)/ Gilberto Parra
04.- “Dolor de amor” (Balada rítmica)/ Mauro Posadas
05.- “Yo vendo unos ojos negros” (Merequetengue tropical)/ Juan Fraga Coll
06.- “Abrázame” (Chicana norteña)/ Javier Sanromán
07.- “Después de tanto tiempo” (Cumbia)/ José María Napoleón
08.- “Boda truncada” (Ranchera norteña)/ Gilberto Díaz
09.- “Tú y yo” (Balada)/ Juan Guevara
10.- “Te pido que vuelvas” (Cumbia)/ Juan Guevara
11.- “Me haces falta” (Balada)/ Mauro Posadas
12.- “Cómo te extraño” (Tecnocumbia)/ Mario Alberto Anguiano



Fuente: Memoria histórica personal (50%), información obtenida del CD Memorias (30%) y de internet (20%)


Fotografía: Portada y disco Memorias/ tomada por Eduardo Marcos

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